
Cómo se fabrica el acero inoxidable
Si quieres conocer cómo se hace el acero, sus propiedades y proceso de fabricación, no podías encontrarte en mejor lugar. En Imvsa, especialistas en envases metálicos de excelente calidad, te queremos explicar bien cómo se fabrica el acero o de qué materia se obtiene.
Así que no pierdas detalle alguno acerca de cómo se fabrica el acero.

Qué es el acero inoxidable
El acero conocido como inoxidable es una aleación de hierro que contiene un mínimo de 10,5% de cromo, lo que le confiere su característica resistencia a la corrosión.
Este material versátil y duradero también puede incluir otros elementos como el níquel, molibdeno, titanio y niobio, que mejoran sus propiedades mecánicas y anticorrosivas.
La clave de su resistencia a la corrosión radica en la formación de una capa pasiva de óxido de cromo en su superficie. Esta película microscópica, autorreparable en presencia de oxígeno, protege el metal subyacente de la oxidación y otros tipos de degradación.
El acero inoxidable destaca por su:
- Durabilidad y longevidad
- Resistencia a altas y bajas temperaturas
- Facilidad de limpieza y mantenimiento
- Apariencia estética atractiva
- Capacidad de reciclaje al 100%

Qué materias primas son necesarias para formar el acero
Debes saber que el acero en sí resulta de una aleación entre el carbono y el hierro, siempre y cuando la cantidad de carbono no supere nunca el 2%. Es decir, la mezcla de estos 2 elementos (o más) en el que uno de ellos cuente con mayor cantidad.
Si quieres conocer más acerca de las ventajas del acero inoxidable, en nuestro blog encontrarás más información al respecto.
En cambio, cuando hablamos de acero inoxidable nos estamos refiriendo a la mezcla de distintas materias primas tales como las siguientes, de cuya mezcla se extrae el acero inoxidable.
- silicio
- níquel
- molibdeno
- cromo
- hierro
En función de las proporciones que se usen dará lugar a un tipo de acero inoxidable u otro.

Proceso de fabricación del acero
El proceso para obtener el acero inoxidable resulta bastante sencillo a primera vista como te enumeramos seguidamente.
Fundir las materias primas necesarias
Para lograr la fusión de estas materias primas, el proceso se realiza dentro de un horno (generalmente eléctrico aunque no requisito necesario) y suele tener una duración no inferior a las 8 horas ni superior a 12.
Quitar los posibles excesos de carbono
Una vez se han fusionado las materias primas, el resultado hay que colocarlo en un sistema conocido con las siglas inglesas VOD (Descarburación de Oxígeno al Vacío) para eliminar el exceso de carbono.
En función de la cantidad o porcentaje de carbono que se consiga suprimir, ello podrá afectar de forma directa tanto la dureza del acero inoxidable como a su resistencia de tracción.

Agitación
Este paso hace referencia al proceso de afinar la calidad del acero final. Es decir, lograremos un acero inoxidable mucho más uniforme mediante la agitación con el objetivo de eliminar elementos específicos de la mezcla de materias primas.
Cómo se forma el metal
Conforme pasa el tiempo el acero inoxidable comienza a bajar de temperatura. Cuando se haya enfriado lo suficiente será el momento de someterlo a distintos procesos de conformado, como puede ser, por ejemplo, el laminado en caliente.
Gracias a este tipo de laminado podemos conseguir un aspecto rugoso para el acero en cuestión.
Recocido
Para poder alterar de la mejor manera posible las propiedades mecánicas del acero tenemos la posibilidad de recocerlo. En este proceso se vuelve a calentar y a enfriar nuevamente el acero, siempre con un control total sobre las temperaturas.

Cómo damos forma al acero inoxidable
Una vez se ha sometido al recocido, se vuelve a someter al acero a una serie de procesos de conformado y corte.
Este corte podrá ser de forma mecánica haciendo uso de cizallas de tamaño considerable o también mediante punzonadoras CNC para poder cortar láminas mucho más finas.
Acabados
Cada fabricante suele aplicar distintos acabados al acero inoxidable justo antes de remitirlo a otros fabricantes. El acabado que se aplica al acero inoxidable siempre variará en función del uso que se le vaya a dar.

Tipos de acero inoxidable
La selección del tipo adecuado de acero inoxidable depende de factores como el ambiente de uso, requisitos de resistencia y consideraciones económicas, garantizando un rendimiento óptimo en cada aplicación.
Podemos clasificar el acero inoxidable en 5 grandes grupos que pasamos a enumerar.
Austeníticos
Son los aceros inoxidables más comunes, como el acedro 304 o el 316. Ofrecen excelente resistencia a la corrosión y formabilidad. Se utilizan en utensilios de cocina, equipos de procesamiento de alimentos o aplicaciones arquitectónicas.
Ferríticos
Como el acero 430, son magnéticos y tienen una buena resistencia a la corrosión. Se emplean en electrodomésticos y sistemas de escape de automóviles.

Martensíticos
Incluyen aceros tales como el 410 o el 420. Son endurecibles por tratamiento térmico, lo que los hace ideales para cuchillería y herramientas de corte.
Dúplex
Combinan propiedades de austeníticos y ferríticos. Ofrecen alta resistencia y durabilidad, siendo utilizados en industrias petroleras y marinas.
Endurecidos por precipitación
Como el 17-4 PH, proporcionan alta resistencia mecánica. Se usan en la industria aeroespacial y en aplicaciones de alta precisión.

Esperamos desde IMVSA que este contenido te haya resultado de utilidad y sepas ahora cómo se fabrica el acero inoxidable.